Entre semana siempre desayuno sola. Nuestra organización familiar consiste, básicamente, en que yo entre a trabajar muy temprano para poder salir a tiempo y recoger a los niños del colegio. Borja se encarga de llevarlos al colegio por la mañana y desayunar con ellos.
Creo que nos apañamos muy bien pero sinceramente echo de menos desayunar todos juntos. Por eso, el fin de semana lo doy todo y suelo poner la mesa bonita, preparar cosas ricas y disfrutar de ese tiempo que de lunes a viernes no tengo.
La semana pasada, además, estrenamos mantel de lino, de un color que habitualmente no usamos en casa. Cuando quiero cosas rosas estoy siempre en minoría y, por eso, tener un mantel de este color es para mí una gran novedad. Viene con 6 servilletas a juego y, ahora que hemos decidido dejar de usar en nuestro día a día servilletas de papel, nos vienen fenomenal.
Los niños tomaron croissants (un día es un día!) y nosotros tostadas con aguacate. Pocas cosas me gustan más que una buena tostada de aguacate, las disfruto muchísimo!
Además, fresas, granola casera y yogur para todos! La verdad es que más que un desayuno fue un brunch en toda regla....
Como sé que me vais a preguntar, los vasos con nuestras iniciales son de Design Letters. Los posavasos de madera de Curiosite, aunque no sé si los tienen porque son de hace mucho, y del resto de cosas no tengo mucha referencia, ya que son cosas que han estado en casa desde siempre y algunas ni sé de donde vienen!
Ah, bueno...el cuenco triangular con los croissants lo pintó una amiga mía en mi despedida de soltera (es una larga historia), y la cafetera y el azucarero son de Alessi. Y no me olvido de la botella con tapón de corcho, que muchas tendréis en casa porque es de Ikea, un hit de ventas porque la verdad es que es un diseño precioso. Ahora la he visto también pequeña y es ideal.
El desayuno es, como os digo, uno de mis placeres del fin de semana. Me encanta hacerlo sin prisa y disfrutando en familia.
Y vosotros ¿cómo desayunáis el fin de semana?