Buenos días
Hoy, 6 de septiembre, empieza nueva temporada. Después de un mes de parón para disfrutar del verano, de las vacaciones y, sobre todo, de la familia, vuelvo a la carga con energías renovadas.
Para empezar, qué mejor que contaros un poco cómo ha sido mi verano, aunque seguro que ya habéis visto algo en Instagram y Facebook. Por si no os habéis pasado por allí, os cuento aquí que hemos estado en Cádiz, con un break de tres días en Portugal y que, para terminar el verano, hemos hecho escala de fin de semana en Madrid, como colofón final. La verdad es que no me puedo quejar, ha sido un mes de Agosto muy completo y divertido.
De todo lo que hemos hecho en estas vacaciones, quería contaros cuales han sido los 3 mejores momentos de todos, esos que me gustaría no olvidar nunca y de los que pienso sacar fotos en papel.
1. Nuestra cena para dos en Casa Modesta. Ya os contaré en un post como fue nuestra escapada a este hotel en el Algarve, la costa sur de Portugal, porque hay mucho que contar (y que recomendar, sin duda). Lo mejor de todo fue la cena que disfrutamos en el hotel una de las noches que pasamos allí: cataplana para dos, casera 100%. Bajo las estrellas, junto a la piscina, y, sorprendentemente, privada. La noche anterior se habían quedado a cenar casi todos los huéspedes del hotel, pero ese día solo estuvimos nosotros, mano a mano con Carlos, el dueño del hotel.
2. La boda de mi prima Ángela. Cuando tu familia es grande, y cada uno vive en un sitio, los eventos en los que puedes verlos a casi casi todos, son una gran alegría. Fuimos todos a Madrid desde sitios tan dispersos como Lisboa, Ibiza, Inglaterra, Cartagena, Sevilla, Granada o Valencia, y disfrutamos muchísimo juntos. Los novios se preocuparon mucho de que todos disfrutásemos y la verdad es que mereció la pena hacer el esfuerzo de acabar nuestras vacaciones en Madrid para compartir este día con ellos. La que más disfrutó, sin duda, fue mi abuela, que consiguió reunir a sus 8 hijos y a 18 de sus 20 nietos ¿qué me decís?
3. Las puestas de sol en Cádiz son una maravilla, y tendría muchos momentos para compartir con vosotros, pero, sin duda, me quedo con la que vimos desde San Fernando, uno de los pueblos más cercanos a la capital, que además es el pueblo natal de mi abuela y mi padre. Os recomiendo acercaros al barrio de la casería porque ver atardecer desde su pequeña playa es una auténtica pasada.
La verdad es que han sido unas vacaciones estupendas, con muchos menos sobresaltos que las del 2016 (en las que nos tocó ir 8 veces al médico, el viento de levante no paró de soplar y casi no pudimos pisar la playa, y además nos robaron en casa). Estas han sido más tranquilas, que es justo lo que necesitábamos después de un final de curso bastante duro, y que nos han dado la fuerza que necesitábamos para afrontar el nuevo curso con una sonrisa.
Espero que vosotros tengáis también la energía bien arriba, la sonrisa puesta y ganas de hacer que este curso que comienza sea genial.
Nos vemos mañana!
Al igual que tú he tenido un buen verano, sin sobresaltos de ningún tipo, disfrutando 5 semanas de tu tierra que me tiene enamorada, con un clima estupendo y unas puestas de sol que, como bien dices, son espectaculares.
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