Buenos días
El casco histórico de la ciudad de Sevilla me parece de los más espectaculares y bonitos del mundo. Conocer sus entresijos puede llevarnos años, ya que su extensión es enorme y sus calles, en ciertas zonas, son todo un laberinto.
Yo viví 6 años allí, mientras estudiaba en la Escuela de Arquitectura y, gracias a los trabajos que nos mandaban en las diferentes asignaturas, aprendí bastante sobre su historia, su evolución y su idiosincrasia.
Lo que más me interesa del centro de las ciudades españolas es la integración de las rehabilitaciones y construcciones actuales en estos conjuntos con tanta solera y tradición. Soy de las que opina que hay que evolucionar, integrar lo moderno y que, con respeto y entendimiento, es posible dejar una huella bonita de nuestra época en los cascos históricos.
Un ejemplo es esta rehabilitación obra de los arquitectos Inmaculada González y Harald Schönegger. Conecta muy bien con el espíritu de la ciudad y combina sin problema modernidad y respeto del entorno.
Una vivienda muy agradable y luminosa.
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