Lifestyle: tres trucos para usar menos el teléfono móvil

Buenos días!

Hoy paso por aquí para haceros una confesión: vivo enganchada al teléfono móvil. (y tú también...reconócelo)

El hecho en sí es malo pero  reconocerlo es, cuento menos, un buen principio:  os prometo que estoy decidida a utilizar menos esta forma de comunicación con el exterior para centrarme más en el mundo "real".

El problema principal que tiene esta dependencia es que me hace perder el tiempo y  reduce las horas que tengo disponibles durante el día para hacer cosas que realmente necesito hacer. En definitiva, el móvil hace descender mi productividad tanto dentro como fuera de casa.
Un truco que he leído en algunos sitios, para reducir el tiempo que le dedicamos, sobre todo, a las conversaciones de whatssap, es poner el teléfono unas horas al día en modo avión. Me parece un método muy útil, pero no para mí: cuando no estoy con los niños, necesito estar disponible por si me llaman desde el cole o desde casa, porque pueden ponerse enfermos o necesitar algo. Además, mi marido viaja mucho y suelo estar también conectada porque nunca sabemos bien cuándo podrá hablar. Lo dicho, he usado este turco algunas veces pero al final, son pocas.

Sin embargo, aunque esto del modo avión no me resulte del todo práctico, sí que tengo otras  tres pequeñas reglas que me están ayudando mucho:

1. Leer libros. Reinvertir el tiempo que usaba en leer mi TL de twitter o en ver fotos de Instagram en leer un buen libro, me parece mucho más interesante. Además, me ayuda a desconectar en esos días en los que todo parece ser un desastre y, encima, doy ejemplo a Martín. Los peques se fijan en los hábitos de los mayores y tener padres que leen hace que aumenten las posibilidades de que se interesen por la lectura.

2. Dejar el móvil en otra habitación cada vez que voy a comer o que quiero evitar mirarlo. Parece algo simple, pero yo ya había sucumbido más de una vez a la tentación de mirar el whatsapp entre plato y plato, especialmente cuando como sola.

3.  Evitar sacar mi teléfono cuando estoy en una reunión social real con personas de carne y hueso. Sé lo que estáis pensando: esto no puede cumplirse al 100%: es normal que tengas que mandar un whatsapp para decir a qué hora vuelves a casa o consultar en la Wikipedia algún dato para ganar o zanjar una discusión, pero, en general, lo que me propongo es evitar sacar el móvil cuando la conversación me aburre, cuando mi acompañante va al baño o cuando estamos esperando a que empiece la película en el cine. Creo que se entiende el concepto ¿no?

Lo dicho, sienta bien usar menos el móvil, seguro que vosotros también tenéis vuestras pequeñas reglas...¿me las contáis?