Esta foto que subí a Instagram hace un par de semanas me trae unos recuerdos geniales. Es una suerte tener tan cerca de casa un sitio (el antiguo cauce del río Turia) dónde montarnos planes así. A los peques les encanta ver cómo pasan las bicis y, sobre todo, los perros. La verdad es que disfrutamos mucho del día y del menú, que fue todo un triunfo. Nunca habían comido wraps antes y me pareció una forma muy cómoda de comer fuera, tanto que la semana siguiente Martín tuvo excursión con el cole y le puse unos wraps en lugar de bocadillos. No dejó ni las migas.
He elegido esta foto para enseñaros la cara B de mi Instagram, lo que no da tiempo a contar en una sola foto.
Como os digo, a Martín los wraps le chiflaron, pero a su hermano pequeño, más que los wraps, le gustaron los pretzles mini que compré en Tiger. No sé si los probó, pero los metió y sacó todos de la huevera unas cuantas veces.
Eres genial!!!!
ResponderEliminarEn realidad ellos son los geniales: no veas lo que me río!
EliminarMe encanta jajajajajaj es q yo veo esos picnic poco reales porque nadie aguanta sentado se t duermen piernas es rollo comer las hormigas bichos arena tierra vaso no se sujeta jajajaaj xo bueno espero q no hayas cogido muchos nervios jajajajajaj
ResponderEliminarMuy buena
Aquí la verdad es que muchos bichos no hay....se nota que es parque urbano!
EliminarLos picnics empiezan así pero luego acaban como tu nos enseñas. Los picnics están para disfrutarlos. Voy a tener que copiarte el quitamanchas. Besos Yael
ResponderEliminarhttp://siemprehayalgoqueponerse.com/
Copia, copia, porque es una maravilla!
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