Buenos días!
Desde la semana pasada, no estoy actualizando a diario como es habitual. El motivo es que mi ordenador se ha estropeado y estoy esperando a que me digan si tiene arreglo o si al final tengo que comprarme uno nuevo.
Aunque mi primera reacción cuando me ocurrió fue de pánico total, después de unos días y de ver que la cosa iba para largo, me ha invadido una sensación de relax al darme cuenta de que, en realidad, esto me viene en el mejor momento.
Llevo un par de semanas literalmente agotada. En casa estamos teniendo unos meses muy intensos y eso, unido a que he vuelto a trabajar, a que Martín sigue pensando que eso de hacer caso no va con él y a que Nico no duerme las noches completas, me tenía al borde de un precipicio.
Hasta que pueda volver a estar con vosotros a diario, intentaré disfrutar a tope estas vacaciones forzosas y recargar las pilas. El tiempo que antes dedicaba al blog ahora lo estoy empleando en bajar más a pasear con los peques, a coser algunos proyectos que tenía pendientes y a leer más.
(la bici sin pedales de Martín, todo un descubrimiento)
Como os digo en el título del post, podemos llamar a esto casualidad o también podemos pensar en que la naturaleza (electrónica) es sabia y me ha obligado a parar a tiempo para evitar males mayores.
besos a todos!
PD: publicaré algunos días, cuando encuentre ordenador cerca! Mientras, podéis seguir mi día a día en Instagram
Teresa
A veces las cosas suceden por algo :)
ResponderEliminarDisfruta de tu avería!
ResponderEliminarA mi me daría algo pero peor sería que se estropear al iPhone! Al menos con el iPhone en la mano no estás desconectada del todo, es más, puedes hacer gran parte de las cosas que harías desde el ordenador. Un abrazo!
ResponderEliminar