Buenos días!
Cuando una deja de ser primeriza y se lanza a tener un segundo hijo, tiene mucho más claro qué cosas quieren que estén en su nueva maternidad y que cosas no quiere volver a repetir.
El primer verano de Martín, cuando ya tenía casi seis meses, me reconcilié con el porteo, que había probado con el peque recién nacido y que en un primer momento no me había resultado nada cómodo.
Ya os conté mi experiencia en mi blog de ABC, por eso no os voy a soltar otra vez el rollo, pero sí que os recomiendo ir a leer lo que escribí en su día si tenéis dudas sobre el tema.
La experiencia con nuestra mochila ergonómica me gustó tanto que tengo el porteo se metió en mi lista de cosas que sí quería tener en mi nueva maternidad. Cuando nació Nico, otra de las cosas que tuve clara es que quería empezar con el porteo antes, porque con Martín empezamos algo tarde y lo dsifrutamos poco tiempo.
Como la mochila que teníamos con Martín no es la mejor para recién nacidos (aunque la versión nueva que es la Boba 4G, sí que sirve desde el primer día), buscamos otra que cubriera esos primeros meses en los que la nuestra era más floja.
Ahora tenemos la mochila Marsupi, que es muy suavita, muy fácil de poner ya que sus tirantes van con velcros, y muy cómoda de usar. Está recomendada especialmente para los bebés de 3,5 a 10 kg y, por tanto, sirve desde el nacimiento.
¿En qué ocasiones la uso?
1. Para bajar a por el pan, al cajero o a tirar la basura, y no tener que ir con el carrito. La mochila, además deja las dos manos libres.
2. Para ir a al compra "gorda". Cuando tengo que coger carro grande, el carrito es incompatible, y, hasta que Nico no se siente, no nos sirve el asiento que llevan. Algunos supermercados tienen carritos de la compra con grupo 0, pero no tengo la suerte de que en el mío haya.
3. Para ir a la playa. Este es el uso principal que le dimos con Martín y sé que le daremos con Nico. Para verano ya lo llevaremos en nuestra mochila Boba, pero hasta entonces irá en la Marsupi.
4. Para llevarlo a casa de los abuelos. Como allí tenemos de todo, no necesitamos llevar carrito, y muchas veces lo llevamos en mochila.
5. Para pasearlo en casa cuando llora. Parece una tontería, pero puedes mecerlo sin tener las manos ocupadas y mientras puedes hacer algunas cosas en casa.
PD: Aunque nosotros tenemos por circunstancias dos mochilas, hay mochilas que sirven para todas las fases del bebé. Si tenéis dudas, en mochilas portabebés os asesorarán genial y os ayudarán a encontrar la mochila que mejor se adapte a vuestras necesidades concretas.
besos a todos!
Teresa
La verdad es que parece muy cómoda
ResponderEliminarYo también estoy encantada con mi mochila, ojalá la hubiera tenido cuando nació la mayor.
ResponderEliminarSólo tengo la espinita de no haber probado una acolchada, deben ser estupendas.
Yo si llego a quedarme embarazada, tengo claro que caeré con el porteo. No me veo con carrito!
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo! Nosotros estamos encantados, tneemos una manduca que vale desde el nacimiento hasta los 20 kg y la utilizamos mucho para todo lo que tú dices :)
ResponderEliminarSolo tengo palabras buenas para el porteo. Con mi primera hija descubrí la Manduca que me salvó los primeros meses, y ahora con la segunda también es un imprescindible. Nosotros la utilizamos muchísimo para dormirla en casa, y también para poder atender al bebé y a la mayor.. Ya sabes que con dos hijos pequeños faltan manos!!
ResponderEliminarNosotros hemos porteado con mi sobrino y ahora lo haremos con nuestra peque desde el minuto 1. Es una sensación preciosa y ellos van genial.
ResponderEliminarDa gusto leer un post así, y también los comentarios ;) Cada día somos más. Feliz porteo!!
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