Miércoles de arquitectura: Entre catedrales

Buenos días!

Por petición popular y porque esta semana he tenido algo más de tiempo para prepararlo...vuelven nuestros miércoles de arquitectura, y, sin ánimo de ser repetitiva....volvemos a viajar hasta mi ciudad de origen para enseñaros uno de sus pequeños y modernos tesoros arqutiectónicos.

Allá vamos!

La ciudad de Cádiz tiene dos catedrales. Así de simple: la vieja y la nueva.

Esta es la vieja:

Y esta otra la nueva:

Puedes llegar de una a otra en dos minutos, y las dos se asoman al mar por el Campo del Sur.

Entre ambas catedrales había un vacío frente al mar, que el arquitecto Alberto Campo Baeza ha llenado con un proyecto muy especial, que se llama, sin más, "Entre Catedrales".

El proyecto en sí es un balcón al mar, formado por una plataforma elevada a la que se accede subiendo una rampa lateral, que se posa de puntillas sobre las excavaciones arqueológicas que existen en este solar protegiéndolas de esta forma de las agresiones externas.

Como veis, entre las catedrales y el mar hay un paseo marítimo, que además está abierto al tráfico rodado, pues es parte de la ronda exterior de circunvalación de la parte antigua de la ciudad.
La elevación de la terraza salva la cota de circulación de los vehículos, de forma que lo único que vemos una vez en ella es la inmensidad del océano Atlántico.

La zona cubierta de la terraza recuerda a un palio de un paso de virgen de Semana Santa, fiesta muy importante en la ciudad de Cádiz. Además, todas las procesiones tienen que entrar en la catedral nueva para hacer estación de penitencia, con lo que podemos decir que el proyecto se sitúa en el centro neurálgico de la fiesta.

Como material estructural se eligió el acero pintado en blanco, y se le dió el mismo tratamiento que al casco de un barco.

El solado de la terraza se hizo con adoquinado blanco de mármol de Macael en piezas cúbicas de 10 cm de arista.

 A mí personalmente es un proyecto que me encanta, por el sitio donde está, por las vistas tan increíbles que tenemos desde él y por el respeto y el entendimiento que el arquitecto demuestra.

Supongo que muchos los sabeis ya, pero la obra de Campo Baeza se caracteriza por el color blanco y por el protagonismo absoluto de la luz y, cuando es posible, del azul de cielo y del mar.

Este arquitecto pasó su infancia en Cádiz y, según cuenta, fue allí donde se enamoró de la luz atlántica.

Seguro que dedicaremos algún otro post a hablar de más obras suyas, porque es uno de mis arquitectos "de cabecera".

besos a todos y feliz miércoles de arquitectura!

teresa

PD: Casi me olvido de contaros que mañana lanzaré POR FIN el sorteo de LANVIN para H&M!